Comer bonito es fácil. Sólo se necesitan pequeños detalles que inunden de equilibrio y belleza nuestros entornos. Así un acto cotidiano y rutinario como el de comer y cocinar puede ser siempre una ocasión para darse un capricho estético, disfrutar de un momento especial sin necesidad de aspvientos… Por eso visitar la página de la tienda Neest, es para mí un placer enorme. Está llena de detalles preciosos y fáciles de imitar.
Trapos de cocina de lino, bols, servilleteros de metal con formas sutiles, cucharillas de madera para mezclar tu café… La belleza está en cosas pequeñas y cotidianas y tanto en la tienda que os linké como en el blog de Neest (Hello Neëst) lo descubrirás con facilidad y podrás decorar tus rincones favoritos con muy poco dinero.
4 Comments
Gloria
mucho mas rico si el entorno es bonito, pero tu no crees que engordara mas ????
jajajajja!!!
Lila Ortega
jajajaja al menos aprovechará mas sin duda jajaja Gloria bonita jajaja pero siempre en bueno porque la belleza tiene eso no?
Claudia
Ahora mismo voy a visitas la tienda, me encanta comer bonito, eso sí, no se si engorda más como dice Gloria pero más caro seguro porque siempre se me ocurren cositas nuevas para comprar.
Un beso.
Claudia
Lila Ortega
jajaja ay Claudia, si supieras…. tengo tantos trastos que no me caben y a la hora de poner la mesa la dejo tal cual, soy un desastre…