Dirección: Vía Laietana 20.
Ciudad: Barcelona.
Teléfono: 931 85 77 35
Me gusta la comida americana lo justo. Es decir me apetece con muy poca frecuencia, es como un rechazo de plano a los platos hipercalóricos y con exceso de carne. Pero hay casos en que este pequeño desliz se convierte en una fiesta. En el caso de Bernie’s Diner, me ha sucedido. Esta situado entre Carrer de la Princesa, l’Argenteria y Vía Laietana. En un local que siempre contuvo lugares más bien feos, creo recordar que en un tiempo hubo una sala de juegos ¿es posible? si no es cierto el caso es que mi memoria del local no lo favorece mucho. Pero con Bernie’s Diner no dudes ni un instante y atraviesa sus puertas. Encontrarás la típica ambientación de diner americano, con sus decoración vintage de los 50′, siéntate y te sentirás en una escena de Grease.
La carta típica americana con TODO lo que te puedes imaginar cuando piensas en un Diner: Carnes al grill con salsa barbacoa, hamburguesas aderezadas con una multitud de ingredientes, sandwiches, perritos calientes y algunos platos del día como raviolis y macarrones para los más pequeños, así como los tradicionales entrantes (alitas de pollo, patatas fritas, nuggets , los mozzarella fingers, los aros de cebolla) y las deliciosas e inmensas ensaladas que nos permiten agregar un toque verde a una comida contundente. Para finalizar y sin pierde los típicos postres americanos.
En esta ocasión iba con mi amiga Ivana de Mylittlethings (autora de las fotos de los platos) que como yo, ya que estamos, estaba dispuesta a «ponerse las botas»
Pedimos para compartir un medio snack combo (6.90€) con tenders de pollo (solomillitos de pechuga de pollo) deliciosamente empanados, mozzarella fingers, aros de cebollla y alitas BBQ. TODO estaba sorprendentemente bueno y lo digo desde mi prejuicio pues yo temo particularmente a las frituras y soy bastante discreta a la hora de pedir platos rebozados. En este caso me encantó hacerlo: el empanado era crujiente y muy sabroso y no te quedaban rastros de aceite en la boca, era como una costra firme con carácter que aportaba cualidades interesantes a los ingredientes al crear un contraste llamativo. Crujiente por fuera y tierno y caliente por dentro. Como el típico héroe de película americana. Delicioso.
También pedimos una ración de tomates verdes fritos (6.50€). En Bernie’s Diner en lugar de presentarlos en rodajas, los traen enteros, rebozados y crujientes con una leve capa (por dentro) de queso crema. Los jugos del tomate se liberan al cortar la costra firme y el queso aporta untuosidad a esa mezcla, aunque yo dejé un poco del queso para preciar mas intensamente el toque cítrico del tomate. Exquisitos.
De segundos: mi amiga pidió la hamburguesa American Rodeo (7.20€) con bacon, huevo, lechuga, pepino, acompañada de patatas fritas rústicas (3.50€), de corte grueso y con la piel, acompañadas de salsa brava en su punto ideal de picante y un alioli delicado y de textura perfecta (desde ese día deseo regresar para darme un nuevo atracón de patatas de esas y repetir experiencia sin ir tan llena por los entrantes). La hamburguesa preparada con carne de evidente calidad, estaba en su punto y con un sabor delicioso. Quiero aclarar que como siempre me sucede cuando como hamburguesas gourmet, creo que les faltaba en general un poquito de grasa a la mezcla de carne para dar jugosidad (se que esto va en contra de la alta calidad del preparado pues la carne magra es evidentemente más sana y más intensa)
Yo pedí las Bernie’s BBQ ribs, (10.90€) que son IMPRESCINDIBLES. Son unas costillas de cerdo muy carnosas y tiernas que de deshacen en la boca. El secreto es que las dejan en leche algunas horas antes de freírlas y la cocción es pura maestría, la salsa queda caramelizada y perfecta. Venían con una pequeña ración de ensalada de col que aportaba frescura al plato y un poco de ensalada verde, que me encantó. Además acompañé con las patatas chips caseras en rejilla (2.50€) más exquisitas que he comido en mucho tiempo, cortadas y fritas al instante, con ese punto del azúcar de la patata que al tostar adquiere un dulzor inigualable…
Durante cada bocado sentía que no podia más pero no quería detenerme (Me ofrecieron doggie bag, como en América, claro) pero al final no quedó casi nada para llevar… ejemmmm
Quedaba poco espacio para los postres, pero fue imposible decir que no: cheesecake típico americano, (4.90€) untuoso y suave con confitura de fresas, brownie con helado de vainilla (4.90) y crumble de manzana con nata (4.90€)… Los que ya me conocéis sabéis que nunca reservo mucho entusiasmo para los postres, pero realmente vale la pena probar alguno de los tres, o pedir los tres entre varios y compartirlos, son muy sabrosos y bien logrados.
Salí contenta, satisfecha y con ganas de volver y de llevar a mis amigos! Bernie’s Diner es de esos locales redondos: con un servicio encantador, una ambientación agradable, comida abundante de altisima calidad y precios imbatibles.
Buen provecho.
2 Comments
gloria
Hola Lila,
Pues me apetece probarlo. Gracias por la recomendación. No me había atrevido a entrar hasta ahora. Ya te diré como ha ido…
🙂
Lila Ortega
Gloria guapa!!! seguro que te gustará, yo recomiendo pedir con mesura para disfrutar del plato principal y de esas patatas!!!!