LOS SUSPENSOS
Con la enorme oferta de calidad que hay en la city, caer como un pardillo en la idea de “diseño guay equivale a buena cocina” es irritante. Yo caí, y me encontré en un espacio luminoso con mucho sentido estético, pero con una cocina que parecía llevada por un torero con ganas de dejar el peligro y los cuartos… Los camareros de impecable blanco con delantales rojos y sonrisas perfectas, eran atentos y valientes y preguntaban ingenuos “si todo estaba bueno” al ver nuestros platos casi llenos. Impresentables las “legumbres con verduritas y vinagreta de naranja”: garbanzos y judías blancas, de bote, con trocitos crudos de los tres pimientos. Aluciné con el arroz a la cubana: grano duro como el pedernal pero a la vez pegajoso, salsa de tomate, también de bote, y un huevo frito con la yema reventada y los bordes requemados. Os lo juro. No nos atrevimos con el postre. La cuenta ¡20€ por barba!
Barcelona. C/ Princesa, 50.
2 Comments
nek0
Uff! Cómo da rabia cuando vas a un restaurante y todo es de bote, remezclado!! Para eso.. como en mi casa y mucho mejor!! BRRRR!!!!!
tiriti
El local impresiona, he pasado un par de veces por delante y no me he atrevido. En la esquina está el Foro (se come normal a precios normales) y el Santamaría (tapas con fundamento). Todos hemos pecado de fiarnos de la vista, admirar el chasis y no ver el interior, es normal. Lo bueno es que con tu consejo me ahorro un disgusto y dinero.